No vemos a Rodolfo Hernández asumiendo el liderazgo de la oposición en el Congreso de Colombia, ya que este tendria muchos problemas para asumir este Roll.
Las elecciones presidenciales en Colombia las ganó la oposición. Gustavo Petro se había posicionado como uno de los principales líderes de la izquierda y en el 2018 llegó al Senado para representar a esa bancada en el legislativo. Ahora, con su triunfo, y el debilitamiento de los partidos que habían ostentado el poder, dependerá de su estrategia de gobernabilidad y las alianzas políticas cómo se configure el papel del contradictor de su gobierno.
Aunque el Pacto Histórico es una de las bancadas más numerosas del Congreso, no es mayoría. En el Senado, si se suman los afines, podría alcanzar 37 votos favorables con la Coalición Centro Esperanza (14) y dos de Mais y Aico que ocupan las circunscripciones especiales indígenas y cinco del partido Comunes. Pero dependerá de partidos que no lo han acompañado colectivamente para aprobar sus proyectos.
La tarea recae en el senador Roy Barreras, una ficha clave en la campaña presidencial:
“La unidad, la polarización quedó atrás, la construcción de mayorías parlamentarias para hacer las reformas que el pueblo colombiano está exigiendo, garantizar las mayorías en el Congreso, es la tarea que el doctor Gustavo Petro me ha impuesto.
No será tarea fácil. De acuerdo con el profesor Carlos Enrique Moreno, de la Facultad de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales de la Universidad Javeriana, el partido Conservador y el Centro Democrático, por su afinidad ideológica, está claro que se declararán en oposición. Por tanto, el nivel de negociación dependerá del papel que pueda tomar César Gaviria en el partido Liberal, una de las bancadas más numerosas en Senado y Cámara; así como Dilian Francisca Toro del partido de La U.
Este último, podría estar considerando la independencia, porque en un pronunciamiento de su directora tras los resultados, señaló que acompañará iniciativas “que conduzcan al propósito de cambio” y que “permita disminuir la pobreza, la violencia, recuperar la senda del Acuerdo de paz”, que hacen parte de su programa de Gobierno.
Por parte del partido Liberal, la colectividad se encuentra dividida entre quienes respaldan al director y lo acompañaron en el camino por apoyar a Federico Gutiérrez, y quienes se rebelaron para acompañar a Petro. La división de la colectividad, podría ser clave en el futuro legislativo del nuevo gobierno.
Respecto a un líder opositor, como otrora Álvaro Uribe o Petro, Moreno considera que en el legislativo, Paloma Valencia o María Fernanda Cabal podrían ser quienes asuman un liderazgo de oposición. Fuera de ese órgano, Juan Carlos Pinzón, quien renunció a la Embajada de Washington a partir del inicio del gobierno del Pacto Histórico, podría ser una figura fresca y nueva que incluso ya intentó ser presidente.
En el 2018, Pinzón fue fórmula vicepresidencial de Germán Vargas Lleras. Sin embargo, Cambio Radical no tomó postura durante las elecciones presidenciales y no tuvo un candidato avalado, por lo que esa es otra bancada que podría entrar en consideración para las reformas y proyectos de ley del gobierno de Petro.
Sobre la Coalición Centro Esperanza no hay claridad. Humberto de la Calle, quien fue propuesto para liderar a esa bancada en el legislativo, anunció que se declarará en independencia. Pero para el profesor Moreno, aunque se concibió la lista para un equipo, este no funcionará como tal y algunos terminarán por apoyar el proyecto del nuevo gobierno.
Por el Estatuto de la Oposición, el segundo en elección tendrá una curul en el Senado para representar al contradictor del gobierno. En este caso, sería Rodolfo Hernández, pero el excandidato no ha asegurado que vaya a aceptar la investidura, solo lo ha dicho su asesor Ángel Beccassino. Aun así, tendría factores en contra para asumir ese papel.
“No hubo de parte de Rodolfo Hernández un liderazgo político claro que nos diera pistas hoy para pensar que quiere liderar y que puede liderar el ejercicio de la oposición. Uno analiza la personalidad de Rodolfo Hernández y no ve en él el líder que pueda aglutinar, escuchar, acercar posiciones y estructurar de una manera articulada el ejercicio de la oposición. Y no lo ve uno porque su forma de hacer política es individualista, bloqueando muchas veces los procesos de interlocución”, sostiene Patricia Muñoz Yi, docente investigadora de la Facultad de Ciencia Política y Relaciones Internacionales de la Universidad Javeriana.
Según señala, el candidato de la Liga de Gobernantes Anticorrupción hacía parte de una de las expresiones de oposición y cambio en la campaña presidencial, aunque después haya terminado respaldado por partidos que ayudaron a Federico Gutiérrez y capitalizado parte del sentimiento contra Petro. Sin embargo, algunas de sus propuestas tenían coincidencia con el programa del Pacto Histórico.
“Tuvo una campaña electoral efectiva, pero ello no quiere decir que haya construido un liderazgo político social y colectivo que le permita hacer acuerdos con los partidos políticos y que le permita escuchar voluntades de los partidos para poder liderar la oposición”, señaló Muñoz.
En ese sentido, la directora de Posgrados de la Javeriana considera que se debe revisar el Estatuto de la Oposición para casos en el segundo en elección no asuma ese papel. De igual forma, el resultado electoral de la primera vuelta envió un mensaje a los partidos tradicionales que también deben evaluar sus posiciones, porque los resultados fueron en contra de su labor y de sus actores.
“El papel que debe ejercer la oposición hoy con mucha responsabilidad para entender que Colombia no puede seguir obstruyendo la construcción de gobierno, la construcción de gobernabilidad, porque no vamos a poder avanzar en la solución de estos problemas y cada vez son más grandes, que cada vez son más complejos y que los ciudadanos a buena hora por vía democrática buscaron el cambio, porque han podido seguir en la calle, buscando cambios por vías, no institucionales”, sostuvo Muñoz.
Así las cosas, de acuerdo con Moreno, será clave el gabinete que conforme Petro, para consolidar su fuerza en el Congreso de la República, tanto los que pueda conceder a los partidos de interés como el Liberal y la capacidad de negociación de quien ocupe el Ministerio del Interior.
La oposición que tendrá en el Congreso el nuevo mandatario electo también dependerá de las negociaciones y acuerdos que realice el presidente electo de aquí al 7 de septiembre, cuando las bancadas del nuevo Congreso indicarán oficialmente si se declaran de oposición o si, por el contrario, respaldan su mandato.
“Petro comenzará una serie de reuniones con bancadas y con congresistas a nivel individual para hacer acuerdos, de allí pueden resultar oposiciones fijas, en especial con los líderes de los partidos”.
Por su parte, Petro vaticinó en su discurso que su Gobierno tendrá una “oposición férrea” pero indicó que buscará el dialogo. “Bajo los liderazgos que sea, sea el de Uribe, Federico, Rodolfo o todos juntos, será bienvenida (la oposición) en el palacio de Nariño para dialogar sobre los problemas de Colombia”, dijo.
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